lunes, 18 de mayo de 2009

Protocolo militar: no es el enemigo, es un aliado

A pesar de que cada día se habla más de protocolo, hay una parte que está silenciada y de la que apenas nada se sabe en la sociedad civil; es el protocolo militar.
En parte porque se considera demasiado especializado, en parte porque la vida militar ha dejado de ser pública y ha quedado relegada a los actos castrenses, es el gran desconocido del protocolo y sin embargo representa la mejor esencia de la función práctica de esta disciplina y de la cual podemos aprender mucho, intentemos al menos, conocerla mejor.
Como es sabido, las normas sobre el protocolo militar son mucho más frecuentes que las que corresponden al civil, en el que muchas veces cabe la improvisación a falta de normas para la celebración de sus actos. Por el contrario, el protocolo militar es el más antiguo y es fruto de la larga tradición castrense que ha ocupado un papel muy importante en la historia. En el protocolo militar nada se improvisa y todo tiene un porqué. La organización necesaria para llevar a cabo tal hazaña se modula en unas normas muy articuladas recogidas en las Reales Ordenanzas y en la legislación específica.
En mi opinión, podemos dividir el protocolo militar en tres partes muy diferenciadas.
Hay una parte que consiste en todo el ceremonial de Estado y que se recoge en las Reales Ordenanzas. Las Fuerzas Armadas, representando a la Nación y en nombre de los poderes del Estado son las encargadas de rendir los honores que se otorgan a determinadas personas por razón de su cargo, dignidad o símbolo. Cuando éstos se rinden en actos o ceremonias oficiales y se ajustan a la normativa legal vigente se denominan honores de ordenanza. Esta circunstancia da lugar a que éstos sean más conocidos como honores militares y que pueden ser una tributación de honores en vida o por el contrario honras fúnebres en caso de fallecimiento.
Un acto público adquiere la mayor relevancia cuando se rinden honores militares como es una visita o un funeral de estado. Un ejemplo reciente de este último fue el de Don Leopoldo Calvo-Sotelo en mayo de 2008, quien ha sido el primer presidente de la democracia fallecido y donde se sentaron las bases del protocolo para honores fúnebres de un presidente de gobierno.
No sólo las personas reciben esta pleitesía, también la Institución Militar es la encargada de la custodia, honores y defensa de la Bandera y el Himno Nacional, como símbolos de la Patria y de su unidad.
Más especiales aún son los honores al Santísimo Sacramento en las celebraciones de carácter religioso con participación castrense. En la Santa Misa, tras la consagración, se interpreta el Himno Nacional que los asistentes civiles escuchan de pie y los militares en posición de firmes.
Por otro lado están las normas de régimen interior y que ayudan a fortalecer las grandes virtudes militares: patriotismo, disciplina, honor, lealtad, compañerismo, eficacia...La vida diaria en las unidades está llena de actos de cortesía militar como son los saludos, las presentaciones y las despedidas. Esta parte también se alimenta de la costumbre inveterada que supone que dicho comportamiento es de obligado cumplimiento aunque ni siquiera esté escrito.
En la prelación protocolaria el lugar que ocupas define la posición que tienes y en consecuencia define todo lo demás. En las Fuerzas Armadas, el orden jerárquico castrense define en todo momento la situación relativa entre militares, en cuanto concierne a Mando, obediencia y responsabilidad .Como podemos ver, la jerarquía militar cumple un protocolo que define a toda la organización y concreta los deberes y derechos de cada escalafón.
Si en alguna organización las tradiciones, usos y costumbres tienen un lugar de honor es en las Fuerzas Armadas ya que se han forjado durante siglos de historia. Esta es una de las razones por las que también se vela por los valores espirituales y si bien el Estado es aconfesional, el Ministerio de Defensa mantiene una normativa propia que regula los tradicionales actos religiosos en las ceremonias solemnes militares.
Por último hay normas que tienen la finalidad de representar a España con honor o que suponen una muestra de cortesía como por ejemplo todo el ceremonial marítimo que es común a casi todas las Armadas del mundo y que cumplen un papel diplomático importante ya que en la mar a pesar de los diferentes idiomas se habla el mismo lenguaje marítimo lo cual ayuda al buen entendimiento entre diferentes naciones.
Cada vez que un buque de la Armada atraca en un puerto extranjero está representando a nuestro país, prueba de ello es que el Buque Juan Sebastián Elcano ha sido elegido Embajador honorario de la Marca España 2009. Por esta razón es muy importante que ningún gesto sea malinterpretado y por eso de los tres ejércitos, probablemente el más estricto y completo de los protocolos es el de este cuerpo.
Si se quiere conocer a fondo el protocolo no se puede despreciar el militar solamente porque nos parezca complicado, sólo hay que comprenderlo y si lo sabemos adaptar puede resultarnos muy útil y desde luego es siempre enriquecedor.
por Carmen García.-

Protocolo y Discapacidad

Al fin, el protocolo se ha integrado en la dinámica, en la estrategia de comunicación de las empresas y, por qué no, en el movimiento asociativo de las personas con discapacidad.
Muy pocos pensaban en la posibilidad de que dos términos, a simple vista tan dispares como protocolo y discapacidad, iban a hermanarse en tan poco tiempo y del modo en que lo están haciendo. Creían que la discapacidad y el protocolo nunca podrían ir de la mano, que el noble arte del protocolo sólo estaba reservado para unos pocos actos de Estado, actos oficiales, etc. Pues, insisto, no, afortunadamente la experiencia de estos últimos años han dado la razón a los pocos que siempre han creído que el protocolo y la discapacidad pueden conjuntarse y acoplarse de modo perfecto.
El protocolo ha dejado de ser un mero instrumento de "quedar bien" ante nuestro invitado o presidente, a ser una parte integrante del esquema de comunicación de las empresas, instituciones, asociaciones, etc.
Podríamos llenar esta columna de ejemplos que demostrarían la gran utilidad que tiene un buen uso del protocolo en la organización de cualquier acto (desayuno de trabajo, almuerzo, entrega de premios, audiencias, etcétera).
De cualquier modo, me permito dar unas pequeñas pinceladas para demostrar, que a día de hoy, el protocolo y la discapacidad siempre van de la mano:
- La figura del ILS (Intérprete de Lenguaje de Signos).
- La subtitulación electrónica en tiempo real de los parlamentos.
- La instalación de rampas para personas con sillas de ruedas u movilidad reducida.
- La accesibilidad del edificio donde se va a llevar a cabo el evento.
- La transcripción al Braille de texto.
- La importante figura del asistente o del acompañante de las personas ciegas y deficientes visuales.

Se pueden citar innumerables claves que hacen, del protocolo y la discapacidad una única unidad de comunicación.
Es necesario, que desde todos los ámbitos, se comience a tener conciencia de la necesidad de establecer políticas de protocolo para las personas con discapacidad, ya que el noble arte del protocolo nos incumbe a todos.
por David Mesa.-

Buenas maneras en la mesa

Muchos de los acontecimientos y celebraciones sociales se desarrollan alrededor de una mesa. Comer fuera de casa se ha convertido en la forma de esparcimiento preferida para muchas personas de todos los ámbitos sociales. Y cuando salimos fuera de nuestros hogares, no sólo buscamos degustar exquisitos manjares, sino también disfrutar de una conversación agradable en un ambiente familiar o social correcto.
Por esta razón debemos conocer una serie de normas básicas para comportarnos con educación y respeto hacia las personas que nos acompañan en dicho evento o reunión.

Los primeros momentos: Una vez que llegamos a la mesa, se sentarán en primer lugar las mujeres, y después los hombres. Estos últimos separarán la silla a la mujer de su derecha en el momento en el que quieran tomar asiento.
Nos sentaremos a una distancia que nos facilite la agilidad de movimientos (ni muy cerca, ni muy lejos). Para ello debemos de tener en cuenta que el borde de la silla ha de coincidir con el borde del mantel, por lo que nunca meteremos la silla por debajo de la mesa.
Una vez sentados, nos colocamos la servilleta sobre las piernas, sin ondearla delante de las personas que nos acompañan, y apoyaremos los antebrazos, nunca los codos.
Otros detalles a evitar son: los balanceos en la mesa y fumar durante la comida.

Durante la comida: Comeremos al mismo ritmo que el resto de comensales, ni muy rápido (ya que no disfrutamos de la comida); ni muy lento (haciendo esperar al resto de invitados).
Asimismo, evitaremos las conversaciones conflictivas o críticas hacia personas que no están presentes.
Lo más importante en este momento es tratar de evitar ciertos comportamientos cómo:
- Utilizar el mantel o servilleta para limpiar los cubiertos
- Tratar de alcanzar con las manos todo lo que hay sobre la mesa
- Producir sonidos con la boca o labios
- Chuparse los dedos
- Hablar o beber con comida en la boca
- Masticar con la boca abierta
- Mojar pan en salsa
- Desmigar el pan con los dedos
- Utilizar el palillo para asear los dientes

Es necesario cumplir las pautas de comportamiento que aparecen en este artículo si queremos convertir esa velada en algo inolvidable.
por David Mesa.-

¿Qué, cuándo y cómo regalar?

Los regalos suelen ser una muestra de agradecimiento o felicitación hacia otras personas. Aunque, a primera vista, parezca una cosa sencilla, en determinadas circunstancias no lo es tanto. Un regalo puede ser mal interpretado, y en algunos casos, puede llegar a ofender o molestar. O incluso puede llegar a ser interpretado como un "soborno" o una manera de influenciar ciertos comportamientos. Por eso tenemos que tener mucho cuidado con lo que se regala y a quien se regala.

Regalar es un arte. Hacer regalos tienes su estilo propio, y un significado determinado Se puede regalar por tener una detalle, por amistad, para ofrecer una disculpa... pero cuidado. Un regalo inadecuado o desproporcionado puede causar el efecto contrario al deseado. A la hora de regalar nos tenemos que hacer las preguntas básicas: ¿Qué regalar? ¿A quién va destinado el regalo? ¿Cuándo se debe hacer el regalo? y ¿Cómo debemos hacer ese regalo? Tenga en cuenta que contestando estas simples preguntas podrá causar el efecto deseado con su obsequio. ¿Qué regalar? Dicen que los pequeños regalos, mantienen las grandes amistades. Un regalo nunca se hace para ofender a quien lo recibe. Por ello debemos evitar hacer regalos excesivamente ostentosos, independientemente del poder económico que tengamos. Hay que ser prudente tanto a la hora de regalar como a la hora de recibir regalos. ¿Qué podemos regalar? Algo sencillo y de buen gusto. Y si además puede ser de alguna utilidad mucho mejor. Habrá que contar con el grado de confianza-conocimiento que tenemos de la persona destinataria. ¿Cómo se dan? La mayor parte de los regalos se envían por los múltiples tipos de servicios de paquetería/mensajería que existen en el mercado. No obstante, dependiendo del grado de confianza que tengamos con el destinatario, se pueden llevar en mano regalos que la mayoría de las veces se envían (como son los regalos de boda). Hay cierto tipo de celebraciones donde el regalo se suele llevar en mano (como los cumpleaños), y se dan en el mismo momento de la celebración. Otros no permiten estas licencias (aunque se haga) como dar regalos el mismo día de la boda y durante su celebración. Costumbre imperdonable con los medios que existen en la actualidad para hacer llegar cualquier tipo de regalo.
Por último, es necesario saber que siempre que se recibe un regalo, hay que agradecer el mismo, aunque éste no sea de nuestro agrado. Al igual que hay que saber regalar, hay que saber recibir regalos.
por David Mesa.-

miércoles, 13 de mayo de 2009

Los duelos: La pelea por el honor

El orgullo ha sido ( y será ) causa y consecuencia de la gran mayoría de las decisiones fatales tomadas a lo largo de la historia. La Armada Invencible, Napoleón invadiendo Rusia o el hundimiento del Titanic son algunas de ellas. Si este defecto humano lo trasladamos al género masculino obtenemos como resultado el concepto de duelo. El duelo, hoy en día ilegal, fue una práctica habitual entre el S. XV y el s.XX. Podríamos definirlo como un combate consensuado entre dos hombres, un desafiante , que se considera ofendido y desea recuperar su honor, y un desafiado al cual le retan en duelo por una ofensa realizada ( real o subjetiva). Existe todo un protocolo de actuación alrededor de la figura del duelo que vamos a ir desgranando poco a poco.
¿ Cómo retar a alguien a un duelo?: Cuando un hombre se sentía ofendido y de cara a la opinión pública precisaba recuperar su honor, retaba a batirse en duelo a su rival golpeándole con un guante en la cara ( de ahí la expresión, dar un guantazo) o bien dejándolo caer a sus pies. En algunos países de Sudamérica se mojaba con saliva propia la oreja del contrincante. La costumbre de “ dar un guantazo” proviene de una tradición de la Edad Media en la cual, los hombres, al ser ordenados caballeros, recibían una palmada simbólica en la cara, cuyo significado era que se comprometían a recibir una última bofetada, dando a entender que jamás dejarían una ofensa a su persona o señor sin vengar.
¿ Y una vez que te han retado? : Los dos contrincantes debían elegir padrinos o testigos que llevarían cada uno, estos, a su vez, se encargaban de seleccionar un lugar idóneo, donde no fueran interrumpidos, durante la noche cerrada o al amanecer. En el caso de que alguno de ellos quedara herido ( o muriera durante el combate) aquel que sobrevivía contaba con inmunidad legal frente al delito. Es más, existían códigos que regulaban las normas a seguir durante un duelo como son el Code duello que surgió en el Renacimiento italiano ,el Código Irlandés, redactado en 1777 de gran influencia en EE.UU. o el Código Nacional Mexicano ( s.XIX)
¿ Siempre moría alguno?: La idea del duelo a muerte, aunque real, no es del todo exacta. Si bien , en algunos casos se libraban duelos a muerte, lo habitual era dar por concluido el duelo cuando alguno de los caballeros resultaba grave o levemente herido ( duelo a primera sangre). Precisamente por esto, en la mayoría de las ocasiones, la elección del arma determinaba el tipo de duelo a batir. Existen documentos que testifican cómo se llegaron a batir duelos con horquillas para sujetar cerdos, estiércol o globos aerostáticos - Intentando pinchar el globo del oponente -. En muchas ocasiones, los hombres de clase alta ( dando una evidente muestra de su falta de hombría) se batían en duelo a través de sus sirvientes, siendo estos los que luchaban y morían en el transcurso de la pelea.
¿ Cuales eran las armas más populares ? Las armas más empleadas eran la espada de duelo europea y a partir del s XVIII las pistolas. Estos revólveres se fabricaban artesanalmente y de dos en dos con el fin de ser usadas específicamente por los duelistas. Eran los padrinos o testigos los encargados de comprobar que las armas eran iguales y funcionaban correctamente.
Duelo con pistolas: El duelo con pistolas, seguía un protocolo bastante rígido que ambos duelistas por una cuestión de honor respetaban escrupulosamente. Juntos, dándose la espalda el uno al otro, debían caminar un número de pasos (contado y comprobado por los padrinos) y al término de estos, girarse y disparar al contrincante. Algunas veces, los oponentes fallaban intencionalmente el disparo para poder cumplir con las formalidades del duelo sin que ninguno perdiera la vida .En vez de duelo se denominaba “deloper”. La problemática del “deloper” era que ambos, o uno de ellos, violasen el acuerdo y aquel que lo cumplía perdiera la vida. Durante el duelo con pistolas, se permitía un máximo de tres rondas de disparos, más se consideraba ridículo, en el caso de que hubiera un herido porque podía entenderse como ensañamiento y en el caso de que no lo hubiera, por ser una clara demostración de inutilidad y falta de puntería por parte de ambos.
¿ Hoy por hoy, el hombre ha calmado su orgullo viril?: Todavía nos encontramos con noticias en los medios acerca de hombres que han decidido retarse en duelo. En 1990, en Louisiana fueron detenidas 11 once personaspor batirse en duelo en plena calle. En 2005 doce jóvenes japoneses fueron arrestados por idéntico motivo. Ese mismo año el senador Zell Miller al parecer ofendido por las críticas y preguntas del periodista de televisión Chris Matthews exclamó durante el programa; "Desearía vivir en la época en que uno podía desafiar a duelo a una persona". Un año después, en 2006, el ex guerrillero argentino Mario Firmenich, desafió a duelo a un periodista que le hizo una pregunta que no consideró apropiada.
por Cristina Hernández .-