miércoles, 4 de marzo de 2009

La Guardia Suiza

Todo el que haya visitado el Vaticano ha podido fascinarse con la plaza de San Pedro, su Basílica, los frescos de la Capilla Sixtina o la Pietá de Miguel Ángel. Todo allí es especial. ¿Quién no se ha sorprendido al ver los uniformes de la Guardia Suiza o sus armas medievales?

En 1505, el Papa Julio II fundó el Ejército Soberano del Estado Vaticano, compuesto por cien soldados: cuatro oficiales, 23 mandos intermedios, 70 alabarderos, dos tamborileros y un capellán.

Para poder pertenecer a esta guardia tan peculiar hay que ser un varón suizo de entre 19 y 30 años, soltero, haber cumplido una instrucción básica con el ejército, medir más de 1.74 metros de altura y profesar la fe católica.

La Guardia Suiza se encarga de vigilar y proteger el Palacio Apostólico, velando por el orden y la seguridad del Pontífice. Además realiza una importante misión protocolar al oficiar paradas de honor cuando soberanos y embajadores visitan oficialmente a Su Santidad.

El actual uniforme fue diseñado por el comandante de la guardia Jules Répond, modelo que sustituyó al original de Miguel Ángel. El yelmo está ornado con una pluma roja, los guantes han de ser blancos y todos los guardias visten una coraza medieval. El color rojo fue introducido por León X en referencia al escudo de los Medicci, y en honor a la sangre derramada en defensa del papado. Se ha perdido el uso de las botas, que han sido sustituidas por unas medias adherentes a las piernas, sujetas a la altura de la rodilla por una liga dorada. El traje en su conjunto recuerda al esplendor de las cortes del Antiguo Régimen.

La bandera que identifica a la Guardia Suiza consta de cuatro campos, divididos por una cruz latina blanca. En el centro se estampa el escudo de armas del capitán de la Guardia. El cuadrante superior izquierdo es rojo, y tiene las armas del Pontífice reinante. El cuadrado superior derecho y el inferior izquierdo están compuestos por cinco bandas de diferentes colores: rojo, amarillo y azul. Y en el cuadrante inferior derecho, también sobre fondo rojo, las armas del Papa Julio II. La bandera tiene una dimensión de 2,2 x 2,2 metros.

Actualmente el capitán de la guardia del Vaticano, que sirve a Benedicto XVI, es Elmar Theodor Mäder, el mismo que protegió a Juan Pablo II durante los últimos años de su reinado.

La Guardia Suiza, con sus deberes y obligaciones, con sus uniformes, con su protocolo, nos demuestran que aún quedan en el mundo algunos rincones donde disfrutar en el siglo XXI con maravillas del pasado.
Por Esperanza de Toro.-

1 comentario:

  1. De los protocolos más estrictos que he visto nunca. Un gran dilema entrar en la guardia suiza curso formador de formadores

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